miércoles, 13 de junio de 2007

Crítica literària: Anatomía del miedo

El miedo y la valentía son tan solo dos caras de la misma moneda. Para ser valiente, primero hay que sentir miedo y luego saber sobreponerse a él. Esta es la diferencia entre los locos, o temerarios, y los valientes. Mientras los primeros no conciben la peligrosidad de sus actos, los segundos sienten el miedo, pero actúan como deben "a pesar de él".
Ésta es la síntesis del trabajo de Marina. Aunque el nombre del libro pueda llevar a engaño, "Anatomía del miedo" no trata tan solo los diversos miedos que pueden sentir los seres humanos. De hecho, analiza el miedo como una excusa para poder tratar un tema aún más fascinante para el autor: la valentía.
El miedo ha sido a lo largo de la historia una fuente de inspiración para obras de temática muy diversa. Para el filósofo inglés Thomas Hobbes, el miedo al estado de anarquía es lo que hace que los hombres se agrupen en sociedad y se pongan en manos del soberano. A él se atribuye la famosa frase "El día que yo nací, mi madre parió dos gemelos: yo, y mi miedo".
Son frecuentes las citas de escritores y filósofos en el libro de Marina, más que citarlos, sus ideas son recogidas para hacer evolucionar el libro, ya que si bien los primeros capítulos parecen ser una recopilación de los diversos miedos que podemos sentir (miedos normales, miedos patológicos, fobias...), las páginas evolucionan en un orden lógico que nos lleva a los dos capítulos finales dedicados al análisis de la valentía, el leit motive del libro. También las referencias van cambiando a medida que nos aproximamos a los últimos capítulos. Lo que al principio se nos presenta como un libro de psicología, condimentado con pinceladas de neurología, al tratar temas más abstractos (el porqué de la valentía) va derivando hacia el campo de la ética, un terreno más abonado para que Marina verse sus opiniones subjetivas y en el que, sin duda, se siente más cómodo. El contraste es tal que si bien los primeros capítulos dedicados al miedo parecen casi científicos, con datos y citas que corroboran las afirmaciones del autor, los capítulos finales, que deberían ser el clímax del libro, pierden fuerza al ser tan solo las reflexiones personales de Marina. Reflexiones que, a falta de datos o citas que las corroboren, no podemos sino pensar que son en realidad las opiniones personales del autor. Lo cual no es de por si malo, pero a tan bien acostumbrados que nos tenía al principio, hace que el conjunto pierda fuerza.

2 comentarios:

Nuria Vega dijo...

Suau, no desistas, tus publicaciones tienen futuro! jeje _.)

syl dijo...

m'ha agradat molt la presentació del teu perfil :) buscant info d'aquest llibre he trobat el teu blog...salutacions d'una ex pompeiana... :)